El terapeuta adecuado para ti es aquel que mejor se ajuste a tus necesidades personales y te haga sentir cómodo y comprendido. Para encontrarlo, es importante considerar algunos factores clave, como su especialización (ansiedad, depresión, relaciones, trauma, etc.), su enfoque terapéutico (cognitivo-conductual, psicoanálisis, terapia humanista, etc.), y su experiencia. También es importante confiar en tu intuición durante las primeras sesiones: ¿Te sientes escuchado? ¿El terapeuta muestra empatía y profesionalismo? La relación terapéutica es fundamental para tu progreso, así que elegir a alguien con quien te sientas seguro y conectado es crucial.

Mientras que la terapia se centra en el apoyo emocional y psicológico sin el uso de medicación, la psiquiatría se enfoca en diagnósticos médicos y tratamientos farmacológicos para trastornos mentales.

El proceso de emparejamiento con un terapeuta comienza con una evaluación inicial, donde exploramos tus necesidades, metas y preferencias. A partir de esta información, te asignamos un terapeuta cuya especialización, enfoque terapéutico y estilo de trabajo mejor se ajusten a tu situación. También tomamos en cuenta aspectos como disponibilidad y comodidad personal para asegurarnos de que te sientas a gusto con el profesional elegido. Si en algún momento sientes que necesitas un cambio, estamos siempre dispuestos a ajustar el emparejamiento para garantizar que recibas el apoyo adecuado.